martes, junio 15, 2010

Dark Tranquillity en México. El Circo Volador se inundó de una inmensa tranquilidad oscura.


No sé por qué pero esta reseña no salió publicada :P por eso me tardé en publicarla acá. Tarde pero seguro....

Era jueves y México acababa de ganarle a Italia. Anders Jivarp se posicionó detrás de su batería usando la playera de la Selección Mexicana de Fútbol. El Mundial esta de moda aún dentro del Metal.

Imágenes distorsionadas en el fondo del escenario. Se inició un viaje de proyecciones y más imágenes detrás de la banda que alguna vez tuvo entre sus integrantes a Anders Fridén, ahora vocalista de In Flames.

At The Point of Ignition. La voz de Dark Tranquillity, Mikael Stanne, empezó preguntándonos en ésta canción si somos el combustible o la flama. Su voz describía confusión, dolor y tristeza, pero su rostro demostraba felicidad, felicidad de ver a un público mexicano que coreaba junto con él ésta canción, seguida de The Fatalist, ambas productos de We Are The Void, el último álbum de la agrupación.

Mientras Stanne sonreía, Niklas Sundin, guitarrista y alma gráficamente creativa de la banda, se mantenía serio. Daniel Antonsson, el amo de las cuatro cuerdas en ocasiones hacía muecas y sonreía pícaramente. Martin Henriksson, detrás de su guitarra, tenía un semblante de paz y Martin Brändström se mantenía concentrado acariciando cada octava de su teclado.

Había cámaras filmando sobre el escenario y en las gradas, nos pidieron que saludáramos hacia ellas pero nadie entendía por qué. Todos accedimos, pero la verdadera emoción se demostró mientras sonaban temas como Focus Shift, Punish My Heaven, My Negation y The Lesser Faith.

Entonces nos explicaron el significado de aquellas cámaras. Estaban filmando el concierto para próximamente lanzar un DVD.

Minutos antes de que los oriundos de Gotemburgo conquistaran el escenario, unos mexicanos intervinieron en él. Su nombre, Afterhell. Y, nacidos bajo la influencia de Dark Tranquillity, entre otras bandas, tocaron de su propia cosecha canciones como Hellicrisum y Mourning Minds. Fue una rara ocasión en la que el público gritaba porras a la banda telonera y le pedía más.

Después del encore, Stanne prometió que regresarían pronto a México y bajó del escenario para extenderle la mano a los que estábamos frente a él con las gargantas cansadas, los cuellos adoloridos y los cabellos enredados. Therein y The Grandest Accusation nos preparaban para el inminente final.

Es el único lugar que conozco, donde la muerte está más viva. Es cuando la verdad se convierte en mentira, que la muerte está más viva.”. Éstas fueron sus últimas palabras, y llevaban por nombre uno muy adecuado: Terminum (Where Death Is Most Alive).

Pero no se dieron la vuelta y se escondieron detrás del escenario como cualquier banda lo hubiera hecho. Bajaron de él y nos agradecieron por estar ahí, por ir a verlos. México había ganado un partido y casi toda la ciudad lo celebraba, mientras que en el Circo Volador, el resto de nosotros habíamos ganado una grata experiencia con seis suecos contagiándonos su exorbitante y oscura tranquilidad.

1 electroshocks:

Anónimo dijo...

Y cuando vinieron a Peru fue el acabose!!
un buen concierto por parte de ellos!!

Soy yo porque...

-Así lo quiso Satán.

-Así habló Zaratustra

-Elfen Lied me dejó marcada.

- Nunca me gustó el chocolate.

-Soy un tronco para tocar la guitarra.

-Uso la técnica milenaria de Lars Ulrich.

-"para un auténtico filósofo, nunca está de más preguntar"

-NO PUEDO SER ALGUIEN MÁS.